Han empezado la Previa de Navidad mi época prefe!!
Las navidades suelen ser tan variadas como las personas que las festejan, basta ver la variedad de adornos que pueblan las calles y visten los clásicos pinos.
Las ciudades y pueblos se cubren de rojo, dorado, verde; copos de nieve o estrellas de verano, según cada lugar de la tierra.
El aroma a navidad toma forma de encantamiento desde cualquier rincón, la esperanza cobra fuerza especial y los milagros parecen colgar de la rama del árbol navideño; al alcance de cualquier humano, que solo pueda ver más allá de sus propios ojos.
Hay quienes añoran nostálgicos el festejo y la viven en el recuerdo de unos viejos zoquetes de lana colgados de la chimenea donde guardan fotos de lo que fue; hay quienes literalmente y en acto la detestan.
Hay otros para quienes constituye una circunstancia digna de ser vista con indiferencia, un día como cualquier otro, de los tantos que marca el almanaque; y finalmente hay quienes la desean contagiados por la inocencia de los niños y la viven como si fuera la última y la primera.
En esta época, los regalos son especiales, suelen tan diversos como las personas que los obsequian y su destinatario; pueden descender por la chimenea o llegar como en el siguiente caso de la más inusitada forma y cuando uno menos lo espera.
Tal vez, en forma de una carta volando en la mano del viento o una mujer danzando en el aire.
Con la navidad la más sencilla historia cobra un tinte mágico y la más complicada hace pensar en un posible final feliz, “un tal vez” termine bien.
Porque es Navidad y con ella, lo imposible puede dejar de serlo.
